EL “HOMBRE NUEVO SOCIALISTA”
En los años 60 del siglo XX, Ernesto “che” Guevara, guerrillero latinoamericano de ideología socialista, marxista y leninista (comunista), en quien dicen inspirarse los revolucionarios contemporáneos, acuñó el término: “El hombre nuevo socialista”, para referirse a un renovado ser humano: libre de ambiciones; movido únicamente por el “bien común”, en defensa de los más pobres.
De allí entonces, surgen estos individuos que se creen superiores al resto, por ser “de izquierda y de ideología socialista”. Seres casi que espirituales, poco movidos por intereses materiales, solidarios, preocupados por el sufrimiento y el dolor de los más humildes.
Me pregunto: ¿son socialistas por convicción o sólo de labios para afuera?, porque hasta ahora, todos los socialistas a los que he conocido (y la memoria histórica nos relata), son seres humanos egoístas (incluso más que los “individualistas neoliberales“), acostumbrados a exigirle sacrificios al pueblo, mientras ellos viven rodeados de lujo, de riqueza (a la que condenan como “mala” y a la que el resto no tiene derecho), controlando y manipulando a la sociedad desde las alturas del poder. Ya lo dijo la filósofa Ayn Rand: “El hombre que te habla de sacrificios, te está hablando de esclavos y amos, y pretende ser el amo”.
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